Al principio de clase normalmente queremos repasar lo anteriormente aprendido. Con este fin, muchas veces les preguntamos a nuestros alumnos por sus planes, hábitos o expreriencias (depende de los tiempos y estructuras que repasamos). Pero, ¿qué podemos hacer si los estudiantes responden casi siempre lo mismo?
Para mí, lo ideal es repartir entre los alumnos las tarjetas con identidades falsas. Cada una de ellas contiene tres imágenes que corresponden a tres marcadores temporales. El profesor puede adaptarlos a las necesitades y conocimientos del grupo, preguntando, por ejemplo:
¿Qué has hecho estas vacaciones?
¿Qué hiciste las vacaciones pasadas?
¿Qué vas a hacer las vacaciones que vienen?
¿Qué haces normalmente durante las vacaciones?
Además, modificando las preguntas, podemos sorprender de vez en cuando a nuestros alumnos y evitar el aburrimiento.